martes, 16 de junio de 2009

SIGLO VEINTIUNO

Un brillito feliz
Roza mi rostro
Escéptico
Mis labios hacen caso a mi cerebro
Y se mueven
Levemente
Dibujando no una sonrisa
Apenas una sonrisita
Acobardada
Por los acontecimientos
Los malos de siempre
Se reafirman cada día echándole más carbón a su caldero
Ella me anima
Para que deje de señalar con el dedo a los culpables
A los insolidarios
A los que se acaban el mundo
A los que no dan al pueblo las vacunas
A los que no respetan los votos
A los demagogos insolidarios con la democracia
A los que ensucian nuestras calles con propaganda inútil
A los que no interesan los millones de desempleados
Globales
Planetarios
Galácticos
Ella me anima
Mi cerebro responde
Cierro los ojos y miro a mi alrededor feliz
Mi sonrisa, que oculta estaba en mi horizonte
Se coloca rápidamente sobre mi rostro distraído
No vaya a ser que me despierte
Y me de cuenta nuevamente de que
Ni mi pluma
Ni mi arquitectura de palabras
Ni mi solidaridad bien intencionada
Pueden
Contra los canallas intergalácticos
Que nos acechan globalmente
En este jovencísimo
Y vilipendiado
Siglo veintiuno

POEMA PROPIEDAD DE Humberto González Ortiz

3 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Cuantas verdades!

Aunque no se desee ser catastròfico, aunque se quisiera ver el mundo color de rosa, aun cerrando los ojos...¡QUE DIFICIL LA PONEN!, para no ver lo que se cae de maduro


abrazos amigo

malena dijo...

una sonrisa en nuestros rostros es suficiente para seguir la lucha, para encender la llama de la esperanza.

Abrazos.

Anónimo dijo...

soy yo, con mi verdadero nombre


besos y feliz fin de semana...

(antes armida...)