Los remanentes de la espectacular explosión de una estrella, ocurrida en 1572, fueron captados por varios observatorios espaciales. La imagen se logró mediante una mezcla de rayos X e infrarrojos. Los astrónomos “capturaron” los reflejos del rayo provocado por el estallido, al chocar con las nubes de polvo y gas en el entorno estelar; éstos tardaron 436 años en llegar a la Tierra. El danés Tycho Brahe (1546-1601) detalló el fenómeno y concluyó que la “nueva estrella debía encontrarse más allá de la Luna”, explicación discordante para aquella época.
ENCONTRADO AQUÍ
ENCONTRADO AQUÍ
No hay comentarios.:
Publicar un comentario