sábado, 15 de noviembre de 2008

PLATICANDO


En un año pasan muchas cosas

El teléfono esta cerrado

El e-mail no llega al otro lado de la vida

El chat ahora, esta callado incluso con Pepe

El mundo

Está tremendo

En Washington

Se han reunido ayer

Todos los responsables

De liberalizar la economía

Y nos cuentan historias

Y defienden su capitalismo

Y firman papeles

Y comen caviar, salmón

Y brindarán seguro con champán

Y nosotros terrestres planetarios

Miraremos los telediarios

Leeremos los periódicos

Para enterarnos solamente

De lo que a ellos les interesa que sepamos

Y no dirán que liberar la economía

Acabo con la propia economía

Atrapada por liberales y neoliberales

Que ganaron millones

Esparciendo deudas a todo mundo

Hubo un período

En que todos podíamos ir al banco

Y pedir miles de dólares

Para endeudarnos

Y ellos que extendieron cheques por millones

Sabían

Que los miles que pedíamos

Solo valían unos cuantos cientos

El valor real se lo embolsaron

Y empezaron a vender deudas impagables

Entre aquellos que querían también

Ser liberales

Ser neoliberales

Por México te digo

Que Bruno está enorme

¿Te acuerdas de nuestra plática?

No me equivoque

Buenos padres son la Wen y el Pepe

Sonríe madre

Así

Abiertamente

Bruno esta en buenas manos

Por casa

Papá sigue llorando tu partida

Desconsolado ante su soledad

Que se acrecienta

Por su cerrazón

A no cambiar

A no ceder un poco

Nosotros

Lo hemos intentado

Yo procuro llamarlo cada 15 días

Pero siempre acaba él llorando

Diciendo todo lo buena y mala que eras

Lo mala debido a tu familia

Lo buena gracias a sus enseñanzas

Como ves el discurso

Sigue siendo el mismo

No ha cambiado gran cosa

Salvo que tu

Estás ahora

En otra parte

En otro mundo

En otra espacio

En esa dimensión que te permite

Mirarnos a todos a la vez

Cobijarnos a todos con tus brazos

Sonreírnos a todos con tu risa

El México que tú viviste

Casi

Se ha desaparecido por completo

Los asesinatos

Los secuestros

Los avionazos

Las mentiras

Los descaros

Se han impuesto

En el día a día

De tu México

La gente vive

Asustadísima

Pendiente

De quien sube al taxi

De quien atraviesa la acera

De quien a su lado

Viaja en metro

Y aun así

Siguen aferrándose a la felicidad

Y ríen

Y sueñan

Y protestan

Y exigen

Coherencia

Solo que, como sabes

Los que gobiernan son sordos

Van a su aire

Y para legitimarse

Han empezado una guerra contra en narco

Dicen

Solo que sus consecuencias

Se les han ido de las manos

Y los otros de siempre

Solo hablan pendejadas

Lanzan estupideces por megafonía

Dejando a la población

Abandonada

A su suerte

Y los priistas

Tan arcaicos

Tan rancios

Pertrechados

Acechan

Dan zarpazos

Para subir a la silla de nuevo

Y los deslegitimados y los desligitimadores

Allí

Dándoles cancha a los dinosaurios

De siempre

Aquellos desayunos eternos

En los que hablábamos de México

Me siguen faltando

Como tú

Que me sigues faltando

Al otro lado del teléfono

Al otro lado del sello de las cartas

Al otro lado del océano

Para poder darte un beso

Al bajar del avión

Y llegar a casa

Para reconocerte

Para reconocernos

Adiós madre

Mañana te escribo de nuevo

/ Y platicamos /



POEMA PROPIEDAD DE Humberto González Ortiz

2 comentarios:

genessis dijo...

Hola Humberto

Cómo entiendo tu soliloquio!!
Tu pensar en alto también me hace pensar casi lo mismo...

Que tengas un domingo placentero
Abrazos
Con cariño de siempre
Stella

Unknown dijo...

Amiga Stella...

Soliloquio imprescindible en un día tan especial para mí, gracias por compartir... siempre!

un abrazo fraterno!