“… se vive para morir,
Se muere para dar la vida…”
-Rafael Mendoza-
“… Los amorosos se ponen a cantar entre labios
una canción no aprendida,
y se van llorando, llorando,
la hermosa vida…”
-Poema ‘Los amorosos’. Jaime Sabines-
Hace rato
Que
no platicamos
Que
no compartimos
Que
no reímos juntos
Te cuento que,
desde que marchaste
Vienes a
saludarnos todas las mañanas
En
las bugamibilias
En
las auroras
En
los cafés con leche
En
la mesa puesta a punto
Por Roberto
Y
me dispuse lenta, pausadamente
A
recordarte
Cuando en
Barcelona te perdiste y llegaste a casa asustadísima pensando quizás que Ame y
yo te reñiríamos por perderte
Con Roberto de
la mano
Cuando sentados
sobre el parquet de la casa de Urgell nos echamos unos tequilas en aquella
noche
Larga,
tranquila, apacible
Cuando saliendo
del despacho de Oikonos allá en la Condesa compre un pastel en aquella
cafetería de la esquina y lo llevé a casa
Y celebramos tu
cumpleaños con tus carcajadas sin dientes
Cuando te dije
que te fueras tranquila mientras acariciaba tu poco pelo y al día siguiente
abriste los ojotes cuando el buen Bruno se postró
Sonriente, feliz,
pleno entre tus brazos y tu risa
Y
me dispuse lenta, pausadamente
A
recordarte
Me senté en el
silloncito de mi sala
Bajé la luz al
máximo
Pianos de Chopin
Violines de
Mozart
Líricas de
Agustín Lara
Coloqué tequila
en nuestras copas
-¡Salud
madre!
-¡Salud
hijo!...
Respondía yo en
mi soliloquio, mientras mi verso
No
aprendido
No
escrito
No
pensado
No
recitado
Se quedó prendado
de ti que me escuchabas madre y se fue con vos llorando, llorando
/
Nuestra hermosa vida /
POEMA PROPIEDAD DE Humberto González Ortiz
2 comentarios:
¡muy conmovedor! ufff....sentimiento puro..
Miabrazo fraterno.
apappachos para tí Malena... Gracias!
Publicar un comentario