Amig@s bloguer@s...
El sábado por la mañana escuché una entrevista a la periodista Lydia Cacho en Madrid, en la Cadena SER, me hizo mucha ilusión que su voz serena, clara, torturada, perseguida... se hiciera eco en España, para que al menos, unos cuantos, se dieran cuanta de la realidad terrorífica de México, porque ellos, los poderosos y corruptos, siguen empequeñeciendo la grandeza del pueblo de México, que sigue liberando batallas sin trincheras, en México cualquiera que desee decir la verdad, se enfrenta a una pelea a pecho abierto, a cara descubierta, y hay que hacerlo con todas las consecuencias... por ello quiero dejar constancia desde este mi México exiliado, mis palabras de aliento por escribir y escribir, por denunciar y denunciar, por gritar y gritar, por estudiar y proponer, por estudiar y resolver, por estudiar y no dejar nunca sin voz, a todos los millones... que no la tienen, porque cuando se le pregunta a Lydia Cacho por su 'valentía' ella responde que no, que solo es instinto de supervivencia, y que sigue en la brecha porque un día, una niña violada se le acerco y le dijo... ¿tú no nos vas a abandonar verdad?... No puede decir lo mismo el Sr. Felipe Calderón que el pasado 5 de mayo se fué a Puebla para hacerse la foto con Mario Marín, gobernador poblano al que, en campaña electoral, aseguró que le aplicaría el peso de la ley... vemos aqui lo que vale la palabra de estos politiquillos de cuarta, que aunque se escucha en los discursos mediocres, se queda pequeña ante la voz amenazada de Lydia o la voz acallada de Carmen Aristegui.
Por ello aquí esta solidaria mi palabra de poeta, mi pluma de arquitecto de palabras, mi voz que clara se alza, para denunciar, proponer, y construir un futuro, que creemos necesario, diferente, y propio...
Porque si no fuese así... nada de todo esto, tendría sentido...
Un abrazo recalcitrante
.... desde algún lugar del sur del norte...
Dr. en Arq. Humberto González Ortiz
Barcelona a 12 de mayo de 2007
El sábado por la mañana escuché una entrevista a la periodista Lydia Cacho en Madrid, en la Cadena SER, me hizo mucha ilusión que su voz serena, clara, torturada, perseguida... se hiciera eco en España, para que al menos, unos cuantos, se dieran cuanta de la realidad terrorífica de México, porque ellos, los poderosos y corruptos, siguen empequeñeciendo la grandeza del pueblo de México, que sigue liberando batallas sin trincheras, en México cualquiera que desee decir la verdad, se enfrenta a una pelea a pecho abierto, a cara descubierta, y hay que hacerlo con todas las consecuencias... por ello quiero dejar constancia desde este mi México exiliado, mis palabras de aliento por escribir y escribir, por denunciar y denunciar, por gritar y gritar, por estudiar y proponer, por estudiar y resolver, por estudiar y no dejar nunca sin voz, a todos los millones... que no la tienen, porque cuando se le pregunta a Lydia Cacho por su 'valentía' ella responde que no, que solo es instinto de supervivencia, y que sigue en la brecha porque un día, una niña violada se le acerco y le dijo... ¿tú no nos vas a abandonar verdad?... No puede decir lo mismo el Sr. Felipe Calderón que el pasado 5 de mayo se fué a Puebla para hacerse la foto con Mario Marín, gobernador poblano al que, en campaña electoral, aseguró que le aplicaría el peso de la ley... vemos aqui lo que vale la palabra de estos politiquillos de cuarta, que aunque se escucha en los discursos mediocres, se queda pequeña ante la voz amenazada de Lydia o la voz acallada de Carmen Aristegui.
Por ello aquí esta solidaria mi palabra de poeta, mi pluma de arquitecto de palabras, mi voz que clara se alza, para denunciar, proponer, y construir un futuro, que creemos necesario, diferente, y propio...
Porque si no fuese así... nada de todo esto, tendría sentido...
Un abrazo recalcitrante
.... desde algún lugar del sur del norte...
Dr. en Arq. Humberto González Ortiz
Barcelona a 12 de mayo de 2007
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